Empiezo por el principio...
Lo conocí en el Instituto, llegó nuevo (maldita la hora en la que vino a parar a mi Instituto), estando en el último año de bachillerato.
Poco después empezó el tonteo y así lo típico de relaciones que empiezan hasta que nos hicimos novios (no voy a contar la historia porque para mí ni es bonita ni nada, más adelante entenderéis por qué). Aunque con muchas idas y venidas porque:
1· Nunca era sincero, siempre con mentiras y las odio. Creo que no hay nada que odie tanto como la mentira.
2· Él era virgen cuando le conocí y yo no, y eso jamás lo pudo soportar... (idioteces para la época en la que vivimos, ya que quien más y quien menos ha tenido sus cosas, pero es que él era así de idiota, porque sabiendolo ¿para qué estar conmigo?).
Acabó el curso y era momento de pensar en la Universidad. Decidí cuál sería mi carrera (amo lo que hago, mi profesión es tan bonita) y empecé a rellenar papeles para distintas universidades. Cuando acabó el verano, la decisión estaba tomada, entre las varias universidades que me habían aceptado elegí, y en septiembre empezaría el curso en una Universidad muy lejos de mi casa.
Eso hizo que nos plantearamos el dejarlo, ya que iba a ser una relación a mucha distancia, y así lo decidimos, terminamos ese verano. Pero para mi desgracia, esto no iba a acabar ahí...
Poco a poco seguiré contando la historia, de momento se queda ahí.
El peso... he engordado!! Pero me lo estoy tomando con filosofía, paso a paso, sin prisa pero sin pausa. Intento comer bien y sano, porque quiero dejar atrás los atracones y la culpa, pero sé que es un proceso largo...
Poco después empezó el tonteo y así lo típico de relaciones que empiezan hasta que nos hicimos novios (no voy a contar la historia porque para mí ni es bonita ni nada, más adelante entenderéis por qué). Aunque con muchas idas y venidas porque:
1· Nunca era sincero, siempre con mentiras y las odio. Creo que no hay nada que odie tanto como la mentira.
2· Él era virgen cuando le conocí y yo no, y eso jamás lo pudo soportar... (idioteces para la época en la que vivimos, ya que quien más y quien menos ha tenido sus cosas, pero es que él era así de idiota, porque sabiendolo ¿para qué estar conmigo?).
Acabó el curso y era momento de pensar en la Universidad. Decidí cuál sería mi carrera (amo lo que hago, mi profesión es tan bonita) y empecé a rellenar papeles para distintas universidades. Cuando acabó el verano, la decisión estaba tomada, entre las varias universidades que me habían aceptado elegí, y en septiembre empezaría el curso en una Universidad muy lejos de mi casa.
Eso hizo que nos plantearamos el dejarlo, ya que iba a ser una relación a mucha distancia, y así lo decidimos, terminamos ese verano. Pero para mi desgracia, esto no iba a acabar ahí...
Poco a poco seguiré contando la historia, de momento se queda ahí.
El peso... he engordado!! Pero me lo estoy tomando con filosofía, paso a paso, sin prisa pero sin pausa. Intento comer bien y sano, porque quiero dejar atrás los atracones y la culpa, pero sé que es un proceso largo...
Con mi ex me paso algo similar, siempre me tuvo rencor porque no fue el primer chico con el que estuve. Y es una estupidez sumamente prehistórica. Pero ya no pienses mas en esa persona que te daño tanto, no vale la pena!. Animo :)
ResponderEliminarQue bueno que estés tomando las cosas con calma, espero que sigas así. Un día a la vez, sé que es difícil pero tenemos que poder.
Un beso!
Que bestia que se sintiera mal porque tu no eras virgen, no? XD Si fuera por eso, yo tendría que estar tirándome por un puente, ajajjaa
ResponderEliminarViva la buena filosofía! Animosss ;)